El presidente Joe Biden ha dado luz verde a Ucrania para utilizar armas estadounidenses de largo alcance en ataques limitados dentro del territorio ruso, según reporta el diario The Washington Post. Esta decisión, que aún no ha sido confirmada oficialmente por la Casa Blanca, el Pentágono o las autoridades ucranianas, se produce en medio de la preocupación por el despliegue de hasta 10,000 soldados norcoreanos que se han sumado a las fuerzas rusas. Las fuentes revelan que el uso de estas armas, específicamente misiles ATACMS, busca no solo fortalecer la posición de Ucrania, sino también enviar un mensaje a Corea del Norte.
La autorización de Biden se interpreta como un apoyo crucial para Ucrania en un momento en que la administración de Zelenski enfrenta la inminente transición hacia el gobierno de Donald Trump. Este último ha manifestado su intención de explorar negociaciones que podrían poner fin al conflicto, lo que a su vez ha generado preocupaciones sobre la posible cesión de territorio por parte de Ucrania. De confirmarse la entrega de estos misiles, se prevé que Ucrania pueda reforzar su posición en futuras conversaciones, aumentando su capacidad para contrarrestar la ofensiva rusa en la región de Kursk.
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