El Gobierno de Castilla-La Mancha ha activado el Plan Especial de Protección Civil ante el Riesgo de Inundaciones en su Fase de Emergencia, tras una reunión del Centro de Coordinación Operativa (CECOP) presidida por el consejero Juan Alfonso Ruiz Molina. Esta decisión se da en medio de una serie de inundaciones que han afectado gravemente la región, concretamente las provincias de Guadalajara y Toledo, donde se han reportado 257 incidentes desde el 8 de marzo. Las autoridades están monitoreando de cerca los ríos Henares, Tajuña, Alberche y Tajo, y se han observado mejoras en el caudal y los desembalses, lo que ha permitido disminuir las afectaciones a las comunidades ribereñas.
La activación del PRICAM implica una colaboración estrecha entre el Servicio de Emergencias 1-1-2 y los ayuntamientos para implementar medidas de prevención y respuesta ante esta emergencia. Se les ha solicitado a los alcaldes que estén atentos a la evolución de la situación y que informen sobre cualquier necesidad adicional. La dirección del Plan seguirá evaluando las incidencias y la efectividad de la respuesta, mientras la Confederación Hidrográfica del Tajo y la Agencia Estatal de Meteorología se suman a los esfuerzos coordinados para enfrentar los desafíos que presenta este temporal.
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