El encuentro entre el Albacete y el Mirandés dejó a Pablo Sáenz como el gran protagonista, quien, cedido por el Granada, brilló al anotar un impresionante gol de volea que abrió el marcador y luego asistió a Higinio para sellar el 3-2 definitivo. Su actuación fue clave para que el Albacete asegurara una victoria significativa, fortaleciendo su posición en la liga. En la rueda de prensa posterior, Sáenz subrayó la importancia del trabajo colectivo, afirmando que “esta victoria es de todo el equipo” y mostrando confianza en la unidad y compromiso del plantel.
El jugador también compartió su entusiasmo por el gol, deseando que vengan más en el futuro, y expresó su felicidad por formar parte del equipo. A pesar de la actuación sorprendente del Mirandés en la temporada, Sáenz dejó claro que el Albacete es fuerte en casa y tiene la intención de mantener su estadio, el Carlos Belmonte, como una fortaleza inexpugnable. Además, se refirió a un incidente en la grada, esperando que no haya sido grave, lo que refleja su preocupación por el bienestar de los seguidores que apoyan al equipo.
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